Dark Music

sábado, 25 de septiembre de 2010

Epistola De Una Hermandad Olvidada


El camino se oscurecía más y mas, la tierra parecía envolverse en silencio, y en un manto de tristezas y recuerdos; dando se cuenta que en la vida se perdían cosas, los amigos, la juventud, las riquezas, pero no su única compañera la soledad.

A la luz de la luna reflejaban aves coloridas de una luminosidad que para el hombre era ya imposible ver, las horas quebrantadas se llenaban de suspenso con el latir del corazón del aterrado, la traición, y demás características que atiborraban la vida del infeliz, reflejaban en su mirar solo tristezas, desolación, y odio tambíen lo que apenas empezaba a querer, pero pronto entendieron que no podían hacer nada, él viajero estaba inmerso en un abismo donde solo la salida de los cobardes era su salvación, donde prefería herir y no mirar hacia adelante que aceptar la hospitalidad de los peregrinos. Él parecía no recordar los buenos momentos una vez vividos, y un acto de despreciable de miedos ataco como los cobardes, destruyo poco a poco lo una vez con ilusiones se creó, pero también desprecio todo lo que una vez la vida y el destino le regaló, pero en su miraba yacía un vacio eterno, donde solo había cabida para los recuerdos, para una vida pasada y jamás para el presente, ni en los que en este habitaban, es así como lo que una vez fácil nació, también fácil murió y se olvido, dándole paso a la palabra que atiborra la eternidad de los tiempos: HIPOCRECIA.

James Kantillo.

1 comentario: